Cuando al fin piensas que nada te puede sorprender, llega algo que te sobrepasa. No se sí es el mundo, las circunstancias o la gente la que lo consigue, pero siempre algo hace que me sorprenda con mi capacidad de asimilar situaciones inverosímiles, situaciones esperadas pero no por ello menos sorprendentes, situaciones agradables y alguna que otra desagradable también. Está claro que la capacidad del ser humano no tiene límite y la mía… cada día es más amplia. De verdad me gustaría poder afirmar con convicción y con firmeza que estoy CURADA de espanto, pero una vez mas… va a ser que no lo estoy. Cada persona es un mundo y cada mente un misterio y aunque yo tuviera la clave para descubrirlo, algunos MISTERIOS no se dejan.
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